sábado, 22 de julio de 2017

LA ENTRADA (Soy consciente del proceso y por eso, sigo aquí)

Cuando terminaron las vacaciones del 2009, en septiembre también acabó una parte de mi vida. Se fue una parte de mi, entonces tendría unos 13 años, ¿Yo que sabía de nada?
Creo que este blog tiene tantos, tantísimos años, he escrito toda una evolución personal, aunque aparezca más y más de lo mismo, creo que ha sido todo un aprendizaje. Cuando menos he escrito, es cuando más me he empezado a dar cuenta de las cosas y como funcionan, revisando todas las entradas, me arrepiento de haber escrito muchas, por no decir la gran mayoría, pero, creo que a partir del 2015 he llegado a recuperar el sentido común un poco.

He tenido durante todos estos años un sentimiento de culpa, que ha dejado que nazcan todos mis complejos, me he hecho daño a mi misma... Pero me pregunto si de verdad era justo, no, no lo era. Ya no pienso que me lo merezca. Nunca me lo he merecido, la vida no ha sido fácil pero si es cierto que he aprendido a sonreír un poco más, de verdad que lo intento.
No quiero desviarme del tema.

Este blog ha sido toda una terapia para mi, lo empecé a escribir en 2010, pero las entradas que aquí se exponen se remontan a partir de agosto del 2011, tenia un blog anterior a este, la verdad es que ha cambiado de estética y de nombre tantas veces... Realmente, empecé a escribir cuando mi madre falleció, creo que es la primera vez que menciono esto aquí, raras veces lo he mencionado, porque llevo bastante mal dar pena con este tema o que se comparezcan de mi, pero realmente, creo que a partir de esa fisura en mi vida, comencé a interesarme mucho más por la música, a dedicar mi tiempo a aprender a tocar un instrumento, a escribir, a el arte en general, ha sido la vía de escape más fuerte.
Antes de llegar al 2015, he estado muy enfadada conmigo misma, pero yo lo que sentía era miedo, muchas sensaciones a experimentar, emociones fuertes, muchas preguntas. El instituto, la autoestima de mierda que tenía, mi orientación, el miedo a que me gusten las mujeres, el miedo a no saber nunca quien soy. A todo ello me di cuenta de lo vulnerable que soy, que solo estábamos mi padre y yo; la sensibilidad que siento y la verdad, es que tener sensibilidad, es lo más bello y doloroso que he podido tener.
Se reirán de mi por ser sensible, lo sé, afortunadamente no soy la única persona sensible de la tierra, por eso empecé a escribir un blog, gritarle al mundo, saber que no soy la única que está teniendo una confusión y un montón de preguntas que la van a volver loca, que hay más gente que se siente como yo y que me pueden ayudar.
Creo que la fisura de la que hablo, ha hecho que sienta más sensibilidad con lo que me rodea, porque un día, puede que ya no estén, que las aprecie como si fuese el ultimo día y es cierto que a veces me decepciono, aún tengo recaídas.
Odio las despedidas y las pérdidas, porque, se lo que significan, se lo que duelen. Yo nunca he sido perfecta y entiendo que he cometido muchísimo errores, que os voy a contar.
Hasta mis primeras entradas tienen errores ortográficos imperdonables.

A que conclusión quiero llegar y es que no pienso lo mismo que pensaba en el 2011 o 2010, veo una evolución, un cambio en mi, si he dejado de escribir, es porque muchas cosas de las que hablaba entonces ya no eran las mismas. Sé que le he dado mas relevancia a mis prematuras relaciones, las parejas, creo que era el tema más sencillo del que podría hablar y esa actitud ha creado problemas, es cierto. Cómo puedo contarles que coño me pasa, si ni si quiera sé cómo explicarlo, ni como entenderlo. Excepto cuando escribía, quería hablar de mi, pero es cierto, que son los textos más complejos de entender. Un jaleo de ideas y emociones "Da igual, yo las vomitó aquí sin marcar ningún orden y que nadie lo entienda, al fin y al cabo, nadie me pedirá explicaciones, solo valorará la metáfora con la que lo describo" así hasta el 2015...

Noto la evolución, todas esas dudas y preguntas (Que conste que aún las tengo, pero las asimilo con más claridad), me doy cuenta de que no a todas las preguntas se les debe una respuesta. A veces es mejor dejar estar las cosas y cambiar de aires, de perspectivas y eso es lo más difícil, pero el reto está en conseguir que así sea.
Es cierto que he llegado a evadirme con cosas que me han hecho daño. Aprendo. Y ese ha sido mi mayor orgullo, que puedo ser fuerte, lo soy.

Cambió todo, mis ideas, mi punto de vista, mi sensibilidad hacia la vida, la relación con mi padre (Antes era muy complicada), mis amigos, la gente... Dejé relaciones tóxicas de lado, las cuales me costó muchísimo cortar; El instituto empecé a llevarlo bastante bien y mis notas ascendieron positivamente.
Todo de forma gradual, hasta llegar en un punto como 2015, en el que empecé a ser consciente de lo que estaba pasando. Ese año fue el mejor de mi vida, forme la primera banda de música (Diciembre del 2014) mejoré muchísimo con la guitarra, gané por segunda vez un concurso de escritura y otro de diseño. Compuse las primeras canciones (De cara al público), viajé... Fue muy completo, conocí chicas ... (Aunque nada serio xD)
Encontré un estado de motivación, de plenitud bastante puro y alegre, equilibrado, entonces decidí estudiar un grado superior de sonido, otra vez septiembre, el mes de mi fisura, se llevó el 2015.
Parece que lo digo con tristeza, pero realmente, empezar el grado de Sonido y estudiarlo fue más complicado de lo que pensaba, el hecho de que venía con un BTO de sobresaliente y notable, fue empezar  el grado y tener que conformarme con el 5 raspado.
Empecé a ahogarme en un vaso de agua, a plantearme si esto era para mi realmente, si realmente sirvo para esto, si me gustaba, tenía una frustración bastante fuerte, eso se llevaba mis ganas de seguir con el grado. Por otra parte, mi primera banda se fue al garete por circunstancias; empecé en otra, pero no duró mucho, entonces, lo peor que me podía pasar era que ya ni si quiera tenga ganas de desahogarme con la música, un vacío musical muy grande, no quedaba nada, solo estudiar y sacar el curso adelante. Realmente ese invierno del 2015 se volvió bastante oscuro, me vino todo un poco de golpe, recaí de nuevo en la tristeza, pero esta vez no iba a dejar  que pasara por lo mismo de antes, podría tomar otras decisiones.

2016, invierno, si, me siento vacía, mejor conocer a alguien que me llene. Seguí estudiando y sacando el curso si o si, con toda esa poca motivación que aún me quedaba. Llevaba tiempo sin conocer a nadie, soy muy muy muy muy sociable y es cierto que echaba de menos hablar con alguien, estaba cansada de hablar temas superficiales (Mi máscara ya estaba terminada), mis amigos más cercanos se fueron perdiendo, algunos por los estudios... Otros porque se mudaron lejos, y otros porque la relación se "marchitó".
Decidí conocer a alguien (No voy a mencionar nombres) y a partir de ahí, parece que me animé bastante, inicié una relación con esta persona; llevaba unos 4 años sin nada serio y parece que aquello me motivó bastante, parece que ese 2016, oscuro empezó a endulzarse. De alguna manera ese aporte positivo a mi vida aumentó un poco mis ganas de sacar el primer año del grado, entonces lo saqué.

El verano del 2016, no fue tan increíble como el del 2015, pero es cierto que si fue apasionado, cariñoso, como una nube de algodón de azúcar, yo me sentía feliz, la estabilidad con mi pareja parecía ser bastante equilibrada y es algo que agradezco, encontré nuevos hobits... Pero seguía teniendo el vacío musical.
Todo fue tranquilo hasta que llegó septiembre, nuevamente.
A partir de este mes comencé con muchas ganas el nuevo curso, habría más prácticas y menos teoría, en parte iría mejor que el anterior.
Pero la relación, mi relación se rompió por circunstancias y me siguió otra fuerte recaída, seguida de unas cuántas más, idas y venidas. Entonces llego octubre y conocí otra banda de música, esta vez comenzaría como bajista, siempre he sido guitarrista, pero probar cosas nuevas nunca han estado mal.
Tenía tantas ganas de tocar en una banda y iniciar un nuevo proyecto, que el miso día que decidí proponerme como futura bajista de la banda, me compré el bajo, se lo compré entonces al exbajista de mi primera banda, me dijo que no lo usaba y esa misma tarde se lo compre, se lo pagué en tres plazos si no recuerdo mal.

Esta banda tenía y tiene algo de especial, quizás, porque me recuerda a la primera en la que estuve, por lo visto, comprometidos, ordenados, con ganas de tocar fuera del local y yo tenía que demostrar que era igual, desde luego tienen un nivel alto y yo entonces tras tanto tiempo sin tocar, estaba algo oxidada, aún así, quería ponerme al nivel y creo que entrar en el grupo y que quisieran contar conmigo, fue lo mejor que podía pasarme entonces. Mi motivación aumentó, esa desgana fue quedando un poco atrás, yo también quería tocar.
2016 se cerró en Bloodlust, entonces creo que me di cuenta de lo que importaba sacar el curso y ayudar a sacar adelante la banda, es cierto que aun estaba algo tocada por la ruptura, pero supe llevarlo al paso.
Abrí 2017, la noticia más importante fue que teníamos un concierto el 2 de Marzo, era un concurso de bandas, sería el primer concierto de mi vida y quería que saliese a la perfección.
Yo aún seguía con mis idas y venidas, relación que no llevaba a ningún lugar, pero aún así, quería seguir intentándolo, que tonta...
El 2 de marzo llegó, fue un punto de inflexión, ese mismo día tuve el examen más largo y complicado del curso, nada más salir del aula marché a casa, darme una ducha, comer, preparar los últimos detalles...
El concierto salió de 10, pero esa misma noche empecé a plantearme un poco qué estaba ocurriendo con mi vida, por qué hago esto, por qué hago lo otro, para qué lo hago y si obtenía algún resultado positivo. Tenía recaídas, pero no tan fuertes como antes del 2015, contaba con la ventaja de que ya sabía lo que tenía que hacer, la única dificultad era la propia dificultad, era complicado. Sin duda lo es, ganamos la primera fase y pasamos a la semifinal, nuestro próximo concierto era en la sala Caracol un 11 de mayo.

Lo mejor que podía pasarme entonces era aprobar todas las asignaturas del grado y hacer las prácticas hasta junio, no falté ni un sólo día en la empresa, solo para el día de nuestro próximo concierto, entonces la noche del 11 de mayo fue una noche completa, nos la pasamos muy bien y nos vimos premiados pasando a la final del concurso, estaremos en la sala BUT el 24 de Junio.
Mientras tanto aprobé las prácticas y me enganché a rematar el proyecto de final de grado, reconozco que estaba algo motivada y lo hice lo mejor que pude, el 22 de junio lo presente y parece que salió bastante bien, el único inconveniente fue que me pase un poco del tiempo establecido.

Llegó el día 24, en plenos días del orgullo, entonces aquí relevo el tema de mi orientación sexual; Mi madre nunca supo mi orientación sexual, pero con 12-13 años ni siquiera sabía lo que me gustaba, ni si quiera había besado a una chica, a una niña entonces... Al fin y al cabo éramos una niñas y yo estaba buscando respuestas, respuestas inmediatas, no pensaba que el tiempo pudiese estar ahí y que pudiese hacer también daño, no fue hasta pocos meses después cuándo empecé a experimentar, descubrir, corrí y corrí demasiado, la rebeldía rompió las cadenas, aún seguía siendo una niña que estaba empezando a sentir también cambios, el más fuerte, la fisura que nunca he querido mostrar hasta ahora.
No quiero dramatizar, es la realidad que me ha tocado tener, no es justo, ni injusto; Cada uno aprende según las circunstancias que le toca, cada uno venimos de una escuela vital diferente.

En aquel momento, yo sentía una tristeza muy fuerte, esa tristeza podía evadirla de diferentes maneras, algunas eran muy buenas, pero otras también muy dañinas, es cierto que fui tan cobarde de no contar como me sentía, si vacía, si perdida, si no tener ganas de nada, si confusa, mis notas y calificaciones eran pésimas, hasta que llegué a un punto que le conté a mi padre las ganas que sentía de querer acabar conmigo, que esos pensamientos no eran normales, ¿cómo a una edad tan temprana, de disfrutar, podrie tener esos pensamientos? y no sé que me dolió más, si ver la misma tristeza o más en los ojos de mi padre y ese fue el punto más fuerte para plantearme como de verdad funcionaba la vida.
Cuando le conté todo a mi padre, fui a urgencias,  tuve un ataque de pánico incontrolable. Entonces decidí acudir al psicólogo, en sus sesiones hablé de mi atracción por las mujeres, el vacío que sentía, mi madre, empecé a escribirlo todo, todo lo que veis aquí es un proceso que he compartido a través de este blog, quería saber si alguien se sentía como yo, si podría hablar con esa persona, sin que me acaben juzgando o que no me de esa sensación incomoda de que no me está entendiendo. Con el psicólogo supe cómo controlar mejor mis ataques, aunque es cierto que no llegue a hablarle de muchas otras cosas, no se realmente por qué no lo hice. Los ataques de ansiedad fueron desapareciendo casi hasta el 2013, podéis comprobar que es el año con más post publicados, mucha terapia de escritura, también fue el año que tuve una de las peores recaída, tenía tal estado de nervios que mi estómago se cerró. Me curé durante ese verano, la relación tóxica que tenía llego a su fin, al fin y al cabo, lo que fue mi primera relación y la más larga hasta ahora no empezó tampoco bien, no termino mucho mejor y "Lo que empieza mal, mal acaba" entonces ya me estaba dando cuenta de lo fuerte que he sido con todo, el pasado que quiero dejar atrás, el nuevo futuro que quiero comenzar, escribía muchísimo, hasta que llegué al máximo equilibrio emocional y personal en el 2015, mi orientación quedó clarísima, mis ideas cambiaron, fue dejar atrás todos esos estados descontrolados.
En eso puedo resumir todo este tiempo.

Es cierto que antes del 24 de Junio, un 20 de mayo me di una hostia bastante gorda, pero por tonta, yo ya sabía lo que iba a pasar y pasó, mis idas y venidas dieron su fin y yo ya sabía que no podía continuar. Afortunadamente conservo el aprendizaje o la experiencia y supe tirar para adelante. El 24 no ganamos la final, nos lo pasamos muy bien, eso si, pero no fue el mejor concierto. La vida continuaba, el 30 tendríamos otro concierto, quizás el mejor concierto que hemos podido dar, aquello calmó todas mis amarguras. Antes de este concierto, yo ya supe los resultados de mi proyecto de final de grado, saqué un 9, no me esperaba tanto.

Tras el concierto del 30, tuve otra recaída y eso fue hace poco, era consciente de que yo no estaba bien, entonces asimilé que debería enfrentar todo lo que antes yo misma no me permitía, así que se me ocurrió la idea de escribirle una carta a mi madre, porque necesitaba hablar con ella de alguna manera, muy dentro de mi siempre he deseado hablarle de alguna forma durante todo este tiempo y sabía que era imposible, pero lo intenté.
Creo que una vez que lo hice, me sentí mejor, bastante mejor. Me quité una bola que nunca he querido sacar. Creo que fue una terapia distinta de escritura que me resulto muy muy especial, no será la última vez que lo haga.

Me imagino que todo aquel que haya decidido tragarse todo este mogollón se pregunte el "¿Por qué?"
Porque me he dado cuenta que he cambiado y que sigo cambiando, que afortunadamente estoy para decir "sigo aquí". Ahora me preocupa mucho el tema de buscar trabajo. Me he reconciliado con algunas personas que quiero muchísimo y he dejado claro lo que soy a quienes no han sabido entenderlo y no es fácil, pero siempre se puede ser sutil y dura a la vez. Por otra parte, durante todo este tiempo he conocido mucha gente y yo siempre he pensado que soy bastante introvertida, pero creo que conocer y hablar con todas estas personas han hecho que descubriera una parte de mi que quizás negaría en otros tiempos y es que soy muy sociable. He descubierto ese gusto por hablar y conocer personas, y la verdad es que me sube muchísimo la autoestima. Creo que he conocido personas increíbles y otras que conozco, pero es cierto que me gustaría conocer más, tampoco quiero forzarlo demasiado que con el tiempo todo se verá.

Soy consciente de lo sensible que soy y que no debería tener miedo, el miedo me produce enfado. Necesito encontrar la manera de engrandecer todo aquello que antes me motivaba, no puedo conformarme con ser y no ser más.
Lo más importante de todo este tiempo medio ausente, es que estoy aprendiendo a reconciliarme por fin conmigo misma, me cuesta aún muchísimo, porque he tenido un periodo muy largo de odiarme rotundamente, he sido capaz de reconocer mi pasado y es ahora cuando lo estoy entendiendo... Mejor tarde que nunca. Quiero dejar de lado esa aptitud tan orgullosa y a veces egoísta, no decir cosas "Superficiales" que realmente NO SIENTO y todo por el miedo a no sentir dolor, yo también he sido un monstruo por mis propios monstruos.

No soy diferente a los demás y muchas veces este blog fue el "¿Hay alguien ahí?" de mi cabeza, el saber que no soy la única me calma, por eso he querido compartir todo este tiempo y darle sentido al por qué hice este blog, qué me empujó a ello... Y la memoria vital que en él se guarda, lo inmaduras y tontas que son algunas de las entradas y como algunas otras muestran cosas más serias.
Creo que nunca he intentado perdonarme, nunca me había planteado pedirme perdón y pensar en quién soy, aun ese último tema es el que peor llevo, tengo que empezar a moverme para encontrar un objetivo estable, que la vida se termina y yo sin saber a veces que hacer con ella.
Actualmente, a día de hoy solo me estoy dando cuenta de varias cosas, estoy reaccionando y eso es bueno, aunque no sepa como explicarlo aún.

Termino diciendo, que con esta entrada, solo he querido resumir todo lo que ha pasado a partir del 2015, también a modo de reflexión personal y al igual que me gusta conocer a los demás también conocerme a mi misma; todo lo que he cambiado y porque he escrito tan poco, pero creo que esta es LA ENTRADA que reúne todo ese cacho vacío en el que también hay vida. No necesito hablar del pasado, porque el pasado ya está escrito en todos y cada uno de los posts más antiguos. Y aún así "Nada está escrito"

Quizás me esté encontrando...

No hay comentarios:

Publicar un comentario