sábado, 19 de enero de 2013

Atravesante

Duele y arde, como la sustancia que va comiendo tu alrededor, como el acorde que perfora tu alma, como la nota que rasga el ambiente y desvanece tu cuerpo, dejándote sin oxígeno si no suspendida  en una habitación atravesante.

jueves, 17 de enero de 2013

Cubitos de hielo

Derritiéndose mientras su alrededor no hace nada, las gotas de agua caen más frías que ellos mismo y  a su vez queman la superficien que los mantiene...

viernes, 4 de enero de 2013

Te lo prometo.

A veces me paro a pensar, y puedo encontrar lo increible que ella ha sido para mi, pero no me puedo permitir crearla problemas, ni hacerla recaer en nada, ella y yo estamos bien, no me puedo quejar, pero ultimamente me paro a pensar si lo que estoy haciendo está bien, ¿De verdad está bien?

Corro peligro estando tan solo a su lado y mirarla, estos ultimos dias con ella han sido rehermosos, pero es como Romeo  y Julieta, no nos podemos ver o no nos pueden ver juntas, Julieta y Julieta... Por que la última vez que estuvimos juntas, hace mucho mucho tiempo, acabó muy mal y presiento o tengo la sensación de que puede acabar igual, y sinceramente NO PUEDO PERMITIRLO, no puedo permitir crearla un estado de ansiedad, no puedo, porque casi todos o parte de nuestros problemas fueron creados por aquel problema anterior del que escribí antes, ese problema de coinvivencia que tengo... que juro que puedo evitar, pero me resulta tan imposible en ocasiones.

No quiero que ella tenga problemas con su familia, no puedo dejar que eso ocurra, tampoco puedo dejar que ella sufra, no quiero más llantos, no. He notado que esa presión aun sigue viva, creyendo que había muerto, he pensado que había acabado con esto totalmente, pero el ego respira aun,  he sentido que ha vuelvo a desenerrarse, hambriento, con hambre, de posesión, de encerramiendo y ahogo, pero no puedo permitir que este vuelva a intentarlo, juro que lucho contra ello pero llega a ser incomodo y molesto, de arrebatarme todo, como un transtorno bipolar, estoy harta de él y ahora solo juega con lo que aprecio, con mis pensamientos... y su sonrrisa tan burlona y posición amenazante, tan fuerte para derribar, no puedo dejar que algo así destruya lo que he llegado a construir y mucho menos destruya mi alrededor.

Quizás sea una loca que ha perdido el juicio quien escribe en este blog, pero es una sensación preocupante, me pregunto constantemente ¿Estoy obrando bien?, la adoro con locura ¿De verdad es justo esto?... No puedo permitir que cargue con más ella, si no quiero, prefiero eones de tortura, que dejarla sufrir... no puedo.

Quiero verla sonrreir como hasta ahora. Quiero que tenga felicidad, sin volver a los actos del pasado, que me arrpiento de ellos y me juzgo por imprudente, pero de los que lucho ahora por no volverlos a cometer...

No quiero decepcionarte y no lo haré, lo prometo.

jueves, 3 de enero de 2013

Arbol. Vida. Amor.

A veces tengo una gran frustración, me cuesta entender por qué al estar con mi chica soy incapaz de poder estar separada un rato de ella, eso no es bueno, reconozco que no es bueno recibir excesivo cariño las 24h del día, claro que yo siempre he sido muy cariñosa, pero quisiera poder tener un control, un control que cuando lo intento llevar acabo, siento en el pecho una gran presión que parece que se quiere llevar mi respiración y no me gusta, es un  mal estar que parece que se apodera del ambiente creando negatividad y lo detesto, porque me siento doblemente mal.

Reconozco que siempre he necesitado mucho cariño y me siento egoista, tengo a mi padre que no dudo que me quiera, tengo a mis amigos, la tengo a ella, pero es un maldito vacío de necesidad absoluta, de una simple caricia, un simple beso, una sola mirada que me derrite el corazón... no me puedo quejar de lo que tengo y no es por alardear, pero como persona me siento a veces verdaderamente mal, incapaz de poder controlar mis emociones, despertando a aquella criatura que saca lo peor de mi... la odio, quiero destruirla o enterrarla para nunca volver.

Un día en clase de dibujo artístico, nos hicieron dibujar un arbol, este arbol lo dibuje con un hueco en su tronco, un hueco grande, profundo y oscuro, una vez que terminamos de dibujarlo, ya que solo disponiamos 10 minutos, nos contaron que cuando dibujamos un arbol, depende de como lo dibujemos, nos identifica la personalidad que tenemos. Por desgracia no pude saber que significaba ese hueco en mi, pues no teniamos más tiempo y posiblemente sea un chorrada, pero es algo que poco a poco voy dandole un sentido en mi, en mi persona.

Tengo en cuenta que me cuesta demasiado hablar de aquel vacío  de mi madre al perderla, no suelo contar estas cosas porque quizas sea orgullo mio... pero no quiero dar pena a nadie, aunque crea a veces que lo tengo superado, ahora poco a poco me doy cuenta que es algo que nunca se supera, pero si lo vas asimilando poco a poco. Me he dado cuenta que por dentro falta algo, algo que hay que llenarlo con mucho amor, un vacio que tras la perdida se ha ido enfriando y congelándose que muy rápidamente, en cuestión de pocos mese, para que tan solo una eternidad pueda conseguir derretir ese glacial que  se ha formado en mi. TENGO UN TERRIBLE DEFECTO y este es el de que me tengo que sentir el ombligo del mundo, me tengo que sentir querida, como la sangre para un vampiro, que una vez que la prueva no puede parar, cuando siento el amor, un nuestra de cariño, no puedo parar, como si mi sed eterna se basara en ello.

He aquí el problema, no es que crea que mi chica me tenga que querer como mi madre, yo no la quiero como mi madre, la quiero como mi chica, se diferenciar muy bien el amor carnal y el amor con el que trataba a mi madre; creo que la perdida a transtornado mis emociones, la falta de un cierto cariño, simple cariño, no cariño de madre, si no cariño un calor, que hace que sienta que mi glacial se desconjele, incluso con mis amigos para, cuando un amigo mio me abraza, siento que  ese glacial se descongela también, cualquier gesto, el más mínimo alimenta el calor y mata el odio, saca lo mejor de mi, pero lo he oprimido tanto tanto tanto, que he llegado a congelar tambien mi alma que solo ELLA puede descongelarla, y cuando  digo descongelar, descongela, solo amor, en cambio un amigo es extraño, enserio, me resulta extraño que un amigo me muestre cariño y eso me hace sentir aun más extraña y confusa, no de confundir mis sentimientos hacia él,  si no de  extrañez de "¿Por qué me das un abrazo?", "¿Que te induce a  hacerlo?" y en la peor de las ocasiones "¿No te da asco abrazarme?", me preocupa,  pero infravalorarme es lo último de todos mis problemas, te lo aseguro, es ese dulce deshacer de mi glacíal, es caliente y no me refiero al sentido sexual, es un cariño demasiado apartado del sexo y de hacer el amor; es dulce, es completo, sentirme querida,  el problema es sentirme querida... ¿O quizás el problema es sentirme demasiado querida porque en realidad soy una engreida?

Es un vacio que caló en mi, puedo considerarme un chica en parte con una serie de problemas, problemas que hace muy complicada la coinvivencia en sociedad y no quiero acarrear problemas con la que actualmente es mi pareja, a hacerla sentir mal... no quiero, no quiero perder a mis amigos y por ello tengo que controlar este mal estar, seguir luchando contra ello; contra aquello que no haga sentirme mal, con un puñal en el hueco de aquel arbol.

En la  familia es complejo, aunque ahora estamos bien, considero que tuve una época en la que hacía lo que me daba la gana. Reconozco que fue una edad muy muy difcil en la que estuve al borde de perderme, de olvidarme quien soy, de destruirme emocional  como físicamente, no comprendia porque lo hacia, pero me sentia bien haciendolo, llena, sin preocuparme por nada, los fuertes ataques de ansiedad que tuve por ello, quizás fuera la alarma de los límites a los que llegué, el miedo, la soledad, la rabia, el odio... tan solo necesitaba posiblemente amor. Me cuesta aun entender mi ansiedad, son tantas cosas en tan solo una, son demasiadas cosa que se juntan a una sola, mi posíblemente y absurda necesidad de cariño, quizás esto sea una tonteria y tal vez quien esté leyendo esto tenga solucciones mejoreas a las que he estado buscando en una eternidad.

No me quejo de lo que tengo, aprecio los más mínimos detalles, y soy bastante agradecida, de pese a todo he intentado ser feliz, pero a la vez  me frustra también hablar de sentirme necesitada de cariño,  eso me hace sentir verdaderamente preocupada de mi misma y se que no es bueno, ni la avaricia... ni la ambición... ni el egoismo...

Juro que intento vencer esa presión  y a veces pierdo ante ella de una manera en la que llego a hacer sentir mal a quienes en el fondo quiero, o quedamos empate pero a la vez, por mi parte, dolida, el ego hay que vencerlo y este quizás sea mi ego.

Sinceramente esta pequeña reflexión  hace sentime, mejor, dentro de lo que cabe, quizás más fuerte, para poder seguir adelante dia tras dia. A VECES RECOMENDARÍA LA ESCRITURA COMO TERAPIA.