domingo, 16 de octubre de 2011

She...

En especial para los musicos, amantes del sonido, sufridores cuando solo surge silencio seguido uno tras otro, aunque el silencio tambien puede ser musica celestial...

Tan absortos todos, tan metidos en nuestro mundo incomprendido y solitario, andamos en nuestro propio suelo, suelo de nadie, egocentrismo como necesidad, placer y excitacion al tocar nuestros fieles instrumentos... adrenalina.

Navegamos por nuestra propia alma, describimos sentimientos encontrados con cada nota musical, señores cargados de talento, genios  de lo imposible... romanticos a no mas poder, suyos para lo suyo,  extrovertido pero a la vez introvertidos, tristes, desesperados al no conseguir lo que quieren, su sonido, su inspiracion, al buscar y no encontrar a su musa cuando la llaman...

Hagamos el amor con nuestro fieles instrumentos, oigamos el orgasmo de cada nota musical, hagase mas fuerte y grande, tan menudo y delicado, tan rapido y tan lento, suspiremos junto a nuestro corazon... la ereccion de la creacion, sintamos la locura junto a la musica, como locura sentimos al perder nuestro amor carnal... que no nos separen de nuestro arte, prohibirnos nuestra forma de vida... seria veneno letal. Como letales serian nuestros propios pensamientos o sentimientos al compartirlo con el mundo mortal.

Encontremos musas, musas para podernos inspirar, encontremos personas... a las que letras de canciones podamos dedicar...

Tan confundidos y tan pensativos... amantes. Sin generalizar, hablando una propia experiencia, mi propia experiencia.

Y tan enamorada tambien estoy de ella que aun no la dedique ni unas palabras... y estas son mi palabras para quien  imita en ocasiones mi pesar y alegria... con una amarga o dulce melodia....

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