viernes, 23 de enero de 2015

El día de mañana

Somos aun inocentes, cuando callamos y dejamos pasar las cosas, personas incapaces de decir "No" cuando se debe.
Siempre diré que decir esta pequeña palabra es todo un don, pocos somos los privilegiados  (siento exagerar). Creo recordar que no hace mucho hablé de esto y sigo insistiendo, con el tiempo se acaba aprendiendo.

Últimamente  llevo sin escribir por aquí, pero mis palabras estaban tan poco cansadas y a su vez tan limitadas entre carácteres, que se han desgastado, diciendo "No", como diciendo  NO  a todos aquellos y aquellas, mis sonrisas  han  acabado  cayendo, no es que sonría menos simplemente sonrío más para mi o solamente para mi.

Escucho nada más que mentiras y es que con el tiempo prefieres quedarte contigo misma que entre las manos del resto. Decides que estos pasos solo los tomas tú y es cierto que con el tiempo van a acabar debiendo más a una misma que una misma a los ajenos.

Con todo esto digo NO, NO y NO, no quiero, siempre he sabido que todo son intereses creados y es mayor la satisfacción  cuando tienes que dar  respuestas irónicas y llevar a cabo actos irónicos.

Cada opción tiene su peso, pero resistiré y aguantaré, en  silencio, observando cada momento, las caras de la moneda del destino suelen dar  vuelcos y el tiempo pone a cada uno en su lugar y todas las mentiras y falsedades acaban saliendo, porque por algún lugar  se asoma la basura cuando hay  tanta.

Mayores son mis intereses propios, más grande es la fuerza cuando empiezo mirando por ellos, que nadie es quien para aprovecharse gratuitamente de mi proyecto de vida.

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