Otoño, otoño es mi estación favorita, precisamente porque es
un periodo de nostalgia, siempre me he considerado una persona algo nostálgica,
dejar el verano atrás y no solo el verano si no todo un año, para mí el año
nuevo empieza en otoño.
Vuelta a hacer cosas nuevas y con muchas ganas en realidad,
no sabría si llamarlo “Carrera” musical, pero mi camino se está forjando un
poquito, no hablo de una carrera universitaria, si no mi carrera de vida,
pretendo vivir de la música, es difícil pero con el esfuerzo y el intento de
hacer mi sueño realidad todo puede ser.
Mis esperanzas están en otro punto, el punto que persigo,
todas mis emociones, todas mis ilusiones, decepciones, logros y derrotas
agrandan ese punto y me guían más al destino soñado, precisamente porque la música es
puro sentimiento y muchas veces con todas la sensaciones incomprensibles
experimentadas siempre tengo algo que hacer, eso me complace, lo único.
Echo de menos algunas cosas, este año ha sido muy completo y
algo extraño, me he sacado el carnet de conducir, mi banda parece encontrar
alguna señal de esperanza, pero dejo de ser posible, aunque este trato deshecho
ha dejado lugar a otras oportunidades, yo entiendo que tal vez esto pueda sonar
a que me alegro de que mis orígenes se hubieran roto. No, para nada, es una
lástima, pero sinceramente ya estaba preparada y mentalizada para esa
despedida, las bandas y las cosas son así. Las oportunidades nacen cuando tú
misma (yo) me doy la propia oportunidad, no hay que rendirse jamás. Hay que
insistir y pelear, buscar. Y yo he visto que es posible y todo se compensa,
desde entonces estoy realmente ilusionada, que salga o no salga me da igual,
pero si me siento feliz en el fondo.
Conocer gente siempre es bueno, buscar apoyos.
A parte de lo que a la música se refiere, este año hice mi
primera escapada de vacaciones con una amiga, lástima que fueron pocos días,
pero si puedo reconocer que fueron los mejores, al menos de mi recopilación de
este año 2015.
¿Qué es del amor? El amor este año ha sido como un mar tranquilo,
sin darme muchos quebraderos de cabeza, pese a los encuentros lejanos con mi
única relación. El amor en si ha sido tranquilo, es cierto que he tenido una
pequeña decadencia y aún sigo en ella, precisamente porque me doy cuenta que
eso del “Amor” es tan solo una ilusión y que nada parecido existe.
Puede ser algo único y que tan solo está en nuestra mente,
en realidad el amor es tan abstracto, la verdad es que es cierto que ando
pensativa y mi conclusión es que todo viene y va. Las historias bonitas solo
están en los libros y que en la realidad
que vivo todo perece, todo se va. Estoy acostumbrada a perder todo lo que
realmente quiero y eso es un sentimiento que siempre me perseguirá. Ese vacío
del que raras veces hablo, porque en realidad, cuando hablo de vacío, pueden
pensar que es de alguien en especial, o un amor que paso… No, para nada, mi
vacío es de niña, es cierto que solo una persona ha sido capaz de llenarlo, o
al menos que no lo notara del todo, mi padre, creo que si no fuera por él mi
vacío maternal durante todo este tiempo hubiera sido mucho más difícil de llenar, septiembre es el mes en el que ya se cumplen 6 años de la despedida y el proceso de madurar tan rápido, aunque a veces con ganas de actuar como una niña o sentirme como tal, creo que ese lado infantil aun no ha muerto y me siento orgullosa de seguir llevándolo conmigo. Es a mi padre a quien le agradezco ese esfuerzo de conseguir que todo
en realidad quedara en un bonito recuerdo, sin necesidad de pensar en la
ausencia, porque los recuerdos son recuerdos… Pero la ausencia de un recuerdo
puede ser realmente terrible.
Todo pasa, yo siento amor, pero amor por las cosas que hago,
amor por mi forma de pensar, amor por mis sentimientos, pero no todo a lo que a
mí se refiere, si no a mi alrededor, la sensación de mi existencia… porque en
el fondo, aunque me cueste demostrarlo o admitirlo, yo también siento, lo que
me frustra es que estoy aprendiendo a ver que la gente no se da cuenta de nada,
lo que flota a su alrededor, somos realmente ciegos que vemos.
Estoy aprendiendo a disfrutar del camino sin compañía,
parece que cuando no quiero nada con el amor, el amor se me presenta, el amor
llama a mi puerta diciéndome a quien podría querer o con quien podría tener la
ilusión de querer, siempre he aceptado y en todas he acabado mal, pero ya no. Rechazo
y niego al amor, no estoy renunciándolo, ya digo que mi concepto del amor ha
cambiado y va más allá de las personas, porque aun así el amor hacia las
personas me resulta totalmente hueco, mi amor es hacia el arte. Las personas
son solo el motivo de mi inspiración, pero no el motivo a las que amar.
Esto no significa que no quiera a nadie, a mi familia, a mis
amigos... mis sentimientos hacia ellos son totalmente distintos. Hablo de ese
amor que nos vuelve torpes y estúpidos; precisamente no me hace falta, no lo
necesito y lo que más me enfada es que se me presente y tenga que resultar una
estrecha por rechazarlo todo. Al menos últimamente es así.
Lo único que me hace falta en este momento, es tiempo para
mí misma, la dedicación que le hago a todo aquello que me gusta, no pido más.
Este año ha sido todo para lo que quiero y creo que me he
acostumbrado, conocer gente nueva, eso sí, pero no escaparme de mis objetivos,
no puedo pedir más de lo que ya tengo, pese a mis desvaríos mentales que me
hacen entorpecer los pensamientos, creo que sigo firme y tenaz. Mis pocas
esperanzas con la humanidad están claras y me han hecho tomar esta decisión,
vivir a merced del arte, por amor al arte… o al menos cumplir con que así he sea.
Es triste, pero a veces pienso que he nacido para vivir con él, que el amor terrenal no está hecho para mi y que no tengo cavidad en él, mi corazón cruza esa frontera de la realidad. Todos dicen que si no he tenido suerte aun, es porque aun no ha llegado esa persona, pero ¿Por que tiene que ser una persona? yo siento que no hay ninguna persona hecha para mi, porque yo no estoy hecha para este mundo. No me creo ningún dios, ni una toda poderosa, para nada, yo soy una persona igualmente, el problema es que las emociones de esta persona son demasiado grandes, como para dárselas a alguien. A veces puedo parecer demasiado fría, pero precisamente porque mis sentimientos pueden parecer un peso y una carga y nadie se merece tal cosa.
Por eso, he decidido, que mi estilo de vida sea así. El sexo, me río del sexo, el sexo es divertido a veces, pero solo a veces, tampoco me hace falta, creo que mi forma de experimentar el sexo es distinto o al menos así lo he descubierto, tengo mis hormonas, obviamente, pero... nada que ver. Como podéis ver, mi decisión de vida, no me quita mi naturaleza humana, pero... creo que para estas cosas soy capaz de disfrutarlas de otra manera. Es difícil de entender, pero hay que sentirlo y yo siento que es así, al menos en el presente, en el ahora, en un futuro tal vez cambie, pero mi rumbo es este y presente está para luchar creando un futuro.
Comienza otoño de lucha y yo venceré con mi alma de artista.
Dänger
No hay comentarios:
Publicar un comentario